Cuando oímos hablar de INMACULADA GUADALUPE Y AMIGOS EN CÍA S.A, seguramente no lo asociamos con alguna marca reconocida porque no se encuentra arraigada en nuestra mente. Pero si nos hablan de ANDRÉS CARNE DE RES, inmediatamente nuestro pensamiento se traslada a un restaurante, a un olor, a una imagen y, por supuesto, a la diversión.
Estas evocaciones son las que explican claramente porqué ANDRÉS ya es considerada una marca notoria en Colombia, reconocida recientemente por la Superintendencia de Industria y Comercio, ya que en la mente de los consumidores existe una asociación particular de un origen empresarial específico y una imagen icónica propia.